7 ago 2022

de los objetos


Cada vez que iba a la casa del maestro Carlos Penelas, de los años que tomé clases con el, aparte del mundo poético en que viajábamos, mi visión recorría  también los cientos de objetos que el atesora de viajes, historias, amigos pintores, Manuel Sanchez, Scannapieco, Luis Franco, su maestro, etc. Y otros tantos que no alcanzaría a nombrar.

Realmente cientos. No obstante, inconscientemente, había algunos de ellos ante lo cual se detenía mi mirada sin saber, me llamaban. Eso ocurrió por años. Tampoco lo recordaba. ¿Cómo recordar tantos objetos?

Estuve este último miércoles de agosto, aparte de los poemas que Carlos generosamente me regaló, me reencontré con ellos, qué felicidad.

Amo los objetos. De un modo deliberado. Hay algo en ellos, un misterio que me habla en su idioma inteligible. Siento que comunican desde su historia. Hay mundos allí al borde de cada objeto, desde su centro, una energía poderosa nos convoca: talismanes. No podría transmitirlo.

Pero esta vez fui, le pedí permiso para fotografiarlos: ya no podré olvidarlos.

Ahora los tengo aquí, a que sigan contando sus historias mitológicas, su incomprensible poema silencioso.

Gracias Carlos Penelas y Rocio Danussi.

















Sandra Figueroa

4 comentarios:

  1. Cada objeto represento para alguien un sentimiento o un valor, mas en el caso que muestras. Muchas piezas bellisimas. Detenerse a observarlas, una maravilla

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  2. Hay algo muy antiguo, pro mordía la, que nos une a los objetos, a la vida misteriosa del mundo inorgánico. Que nos contempla a su modo y nos interpela.

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